Nuevos vigores
Todo buen descanso propicia un reinicio de actividades lleno de energía.
¿En qué nos habíamos quedado? Ah, sí... recomencemos...
De la belleza clásica
Contrariamente a los gustos actuales en donde el tamaño sí importa, en la antigüedad, Grecia lideró la tendencia a valorar y admirar a los penes pequeños, que ensalzaban las virtudes esenciales de la masculinidad. Por tanto el miembro pequeño era un aspecto codiciado en el macho alfa. Pues los hombres ideales eran dioses, héroes, atletas, etc., y todos ellos eran representados con genitales minúsculos y nunca erectos, mientras que las vergas gruesas, a menudo excitadas, peludas y descomunales correspondían a los sátiros o a todo tipo de hombres que de las más altas virtudes descendían a los más oscuros vicios, a la decadencia y al caos. En definitiva, el pene grande, para los antiguos griegos, describía al hombre vulgar, salvaje y bárbaro. Tantas veces nos hemos intrigado por lo excesivamente pequeños que a veces aparecen los penes de las estatuas clásicas, pero claro, lo bello, era otra cosa. La galería de hoy no olvida aquellos principios apolíneos. Veamos:
Bienvenido Franco.
ResponderEliminarA tu regreso prometiste un post muy caliente y vaya que lo lograste esta vez. Tu preguntas ¿donde nos quedamos?. Y yo me atrevo a preguntarte ¿donde comenzamos?. Todavía estoy tratando de reponerme del impacto que me ha causado tu regreso y tus fotos. Porque el olor a macho bello y con vello (el orden de los factores no altera el producto) es indiscutible, sabroso y provocador. Y realmente no creo que solo colabore para generar un poco de calor, sino también para que tengamos unas cuantas cosquillas de esas que se disfrutan una y otra vez, sin duda. Jajaja.
Creo que si te pregunto esta vez que nos tragiste Franco, cometo una semerenda tontería. Esta vez lo correcto sería preguntarte ¿cuántas sorpresas mas nos aguardan escondidas en tu equipaje a tus sobrinos?. Pues me tomaré todas las tazas de café que sean necesarias porque espero no perderme ninguna de ellas. Sobre todo si se trata de una como la de la foto # 15. Por cierto como ya estamos justo a medio año, haber si el Tío Franco se luce con un regalo sorpresa como ese, a final de año. Mmmmm. Guau.
A esta foto solo le hacen justicia tus palabras, las cuales comparto plenamente. " Los hombres velludos son encantadores". Y yo agregaría que todas sus otras partes también. Jajaja.
¡Que alegría tenerte de nuevo entre nosotros Franco. Bienvenido. Un abrazo.
Saludos a todos.
Bien regresado amigo Franco. Aqui tenemos un cache de miembros bien erectos y cojones que estan llenos y seguramento listo para lechearse.
ResponderEliminarEsto es regresar con fuerza si señor !!!
ResponderEliminarDong,
ResponderEliminarHermoso y emotivo tu comentario, que agradezco de corazón.
Y si..., había que poner algo para mantener las manos calientes (y otras cosas también), pues hoy en Buenos Aires hizo un día muy otoñal, gris y frío..., y todos los recursos para generar calor vienen bien.
A tu pregunta acerca de las sorpresas guardadas..., bueno, no serían sorpresas si las desvelase. Algunas cosas tengo pensadas y están en preparación, claro, pero no voy a decir nada. Pero sí puedo decir que al hacer Vellohomo, el primer sorprendido termino siendo yo. Eso es lo interesante que tiene esta actividad cotidiana. Y lo lindo, pues la capacidad de asombro es una de las últimas cosas que se deberían perder, no es así?
Tony,
Así me gusta: energía, firmeza y buenas cantidades de leche en la bolsa de las provisiones.
José España,
A decir verdad..., me encantan estos regresos rutilantes!
Abrazos para todos!
Hot cocks!
ResponderEliminarhttp://mendujourblog.com