Un sábado con Adam

¿Qué es lo que genera el éxito de un actor porno? ¿Qué lo transforma en un porno star? ¿Qué despierta tanto fanatismo y qué hace que a través de los años sus seguidores se multipliquen y sigan siendo fieles a sus encantos?
No creo que sea sólo el tamaño de su pene, de sus músculos o demás atributos que puedan dejarte sin aliento, porque, a decir verdad, tantos dotados que han pasado por el porno gay sin pena ni gloria, dan cuenta de ello.
¿Qué es entonces? Sin dudas, algo especial. Algo que nos despierte una verdadera fantasía (y no hablo de la sexual necesariamente). Si nos detenemos en las imágenes de éste, uno de los daddies favoritos de VH, comprenderemos que más allá de un buen cazzo, de un cuerpo de ensueño, de unos vellos naturales que enmarcan el atractivo viril..., más allá de todas esas cualidades, seguramente nos quedaremos con la impresión que nos deja su rostro, en la expresión de su sonrisa, en la mirada de sus ojos cálidos, todo esto parece ser mucho más importante que una buena verga y un culo de campeonato que, en definitiva van a ser olvidados fácilmente con la aparición novedosa de otras vergas y culos.
Adam Russo, dueño de un ángel especial, definitivamente es uno de nuestros preferidos. Y también una inmejorable manera de empezar el fin de semana.






























Comentarios

  1. A mí me fascina Adam Russo. He visto muchas películas de él y siempre me llama la atención su actitud calma y serena, gozando al máximo cada segundo, sin apuro por acabar y seduciendo a su partner hasta el límite. Sus actuaciones siempre me parecen muy creíbles y auténticas. Tanto en rol activo como pasivo es un daddy de campeonato.

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  2. Compartimos esa fascinación, Deep.
    Y muy interesante hablar de estas impresiones, como tantas de las que se podría charlar horas, café de por medio en un día tan lindo como hoy. No?

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