De la belleza clásica
Contrariamente a los gustos actuales en donde el tamaño sí importa, en la antigüedad, Grecia lideró la tendencia a valorar y admirar a los penes pequeños, que ensalzaban las virtudes esenciales de la masculinidad. Por tanto el miembro pequeño era un aspecto codiciado en el macho alfa. Pues los hombres ideales eran dioses, héroes, atletas, etc., y todos ellos eran representados con genitales minúsculos y nunca erectos, mientras que las vergas gruesas, a menudo excitadas, peludas y descomunales correspondían a los sátiros o a todo tipo de hombres que de las más altas virtudes descendían a los más oscuros vicios, a la decadencia y al caos. En definitiva, el pene grande, para los antiguos griegos, describía al hombre vulgar, salvaje y bárbaro. Tantas veces nos hemos intrigado por lo excesivamente pequeños que a veces aparecen los penes de las estatuas clásicas, pero claro, lo bello, era otra cosa. La galería de hoy no olvida aquellos principios apolíneos. Veamos:
Genial....ya he contado aquí mi caso personal.
ResponderEliminar"Osculos para todos" en vez del convencional "besos para todos" suena más erudito, como esas palabras que aprendemos haciendo crucigramas : óbito, asir, adir una herencia,etc.....
ResponderEliminarPero "no contamos con la astucia" de nuestro Franco. De culos, culos y nada más que culos se trata.
Bienvenidos los culos y los osculos.
Fabrice
Bue... buen plato a degustar este Findesemana,... recuerdo las ostras que se comen en las calles de Paris o marsella..
ResponderEliminarPara quien quiera pasar un rato divertido recomiendo esta historieta alusiva de un tucumano: http://elosculohirsuto.blogspot.com/
especial para la GCU (gente como uno)
Cisplatino: podrías repetir ese "caso personal" para la gente que no te ha leído? imagino una historia "sabrosa"!!!
Este extasiástico post me recuerda el título de una película francesa, "Le ciel sur la tete", pues este es un placer que te deja en el abismo del placer, literalmente todo el placer dem cielo sobre nuestra pequeña estrella.
ResponderEliminarSin duda es un arte hacerla brillar para...y gemir.
Don Pepe