LO MÁS VISTO EN ESTE MES:
Mezcladito de fin de mes
Día de teteras
Cándido y tierno reposo
Cuán fascinante resulta contemplar el sexo viril descansando plácidamente sobre sus mullidos y peludos cojines (¿o debo decir "cojones"?). Todo ahí resume ternura, paz, y habla de la inquietante belleza de la calma cuando ésta es preludio latente del más mínimo cambio de actividad. Asistimos expectantes al excitante espectáculo, y así, podríamos quedarnos horas en ese recóndito acto de observación. Como cuando se contempla el sueño del hombre amado, mirar -o también hacer algo más que mirar- una verga en estado de reposo, es una de las vivencias más encantadoras que pueda haber en el mundo de la sensualidad masculina compartida. --------------------------------- Nota del autor: Cuando vuelvas mañana, ya no las verás tan dormidas.
Penumbra
ReplyDeleteQue deliciosos efectos de la luz tan calida. Hermosas fotografías que hacen posible un tapar completo del sol y ver los rayos en los hirsutos vellos como llamaradas. Se queda uno con ese efecto de.un mirar absorto potenciado por un silencio que abona en la acentuación de la belleza viril.
Don Pepe,
ReplyDeletede tu comentario me gustan estas palabras:
Penumbra
Deliciosos
Hirsutos
Vellos
Llamaradas
Mirar Absorto
Silencio
Viril
Abrazos y rayos