Cuán fascinante resulta contemplar el sexo viril descansando plácidamente sobre sus mullidos y peludos cojines (¿o debo decir "cojones"?). Todo ahí resume ternura, paz, y habla de la inquietante belleza de la calma cuando ésta es preludio latente del más mínimo cambio de actividad. Asistimos expectantes al excitante espectáculo, y así, podríamos quedarnos horas en ese recóndito acto de observación. Como cuando se contempla el sueño del hombre amado, mirar -o también hacer algo más que mirar- una verga en estado de reposo, es una de las vivencias más encantadoras que pueda haber en el mundo de la sensualidad masculina compartida. --------------------------------- Nota del autor: Cuando vuelvas mañana, ya no las verás tan dormidas.
¡¡¡Enorme!!!
ReplyDeleteCuanto arte y trabajo para la carta de presentación que es la portada. No es solo elegir una foto, un dibujo, sino que hacer con ese material. La maestría se nota por ejemplo en la número 8 y otras tantas. No es solo elegir a William Holden o Ray Dragon, es como mostrarlos.
ReplyDeleteCon estas portadas me pasa que al verlas noto :"Oh, cambió la presentación" para ir rápido al contenido de la nota, pero luego invariablemente volver a la portada y apreciarla. Y son muy apreciables. Gracias
Fabrice
Además de ser una carta de presentación, la portada es un muestrario de aquellas cosas que me atraen y que admiro, y, debo confesarlo, una evidencia de mi TOC con lo gráfico y lo visual, las proporciones, etc., lo que habla de mi frustración como diseñador gráfico. Perdón por ser tan autorreferencial. Y gracias por apreciar mis "locuras"...!
ReplyDeleteSaludos!