Divinidades
Vellohomo presenta:
"Dioses y Faunos"
De la belleza clásica
Contrariamente a los gustos actuales en donde el tamaño sí importa, en la antigüedad, Grecia lideró la tendencia a valorar y admirar a los penes pequeños, que ensalzaban las virtudes esenciales de la masculinidad. Por tanto el miembro pequeño era un aspecto codiciado en el macho alfa. Pues los hombres ideales eran dioses, héroes, atletas, etc., y todos ellos eran representados con genitales minúsculos y nunca erectos, mientras que las vergas gruesas, a menudo excitadas, peludas y descomunales correspondían a los sátiros o a todo tipo de hombres que de las más altas virtudes descendían a los más oscuros vicios, a la decadencia y al caos. En definitiva, el pene grande, para los antiguos griegos, describía al hombre vulgar, salvaje y bárbaro. Tantas veces nos hemos intrigado por lo excesivamente pequeños que a veces aparecen los penes de las estatuas clásicas, pero claro, lo bello, era otra cosa. La galería de hoy no olvida aquellos principios apolíneos. Veamos:
Hola amigos, Salut, hoy el cafe se ha vestido gala con el clip que has subido Franco...excelente, gracias por compartirlo con nosotros.Mi cabeza hizo una asociación sensorial y me fui a buscar un poema que havia leído hace tiempo...aqui lo transcribo:
ResponderEliminarCuando uno de Ellos pasaba por la plaza del mercado de Seleucia, a la hora en que la noche se aproxima,
bajo la forma de un joven alto y de belleza perfecta,
con la alegría de la incorruptibilidad en sus ojos,
con su pelo negro, fuertemente perfumado,
los que pasaban lo miraban
y se preguntabanunos a otros acaso lo conocían,
acaso era griego o sirio, o un extranjero. Pero
varios que miraban con mayor atención
entendían y se hacían a un lado;
y cuando el desaparecía bajo las arcadas,
entre las sombras y las luces del atardecer,
dirigiéndose al barrio que revive
sólo de noche, con orgías y libertinaje,
y toda clase de embriaguez y lujuria,
se preguntaban cuál de Ellos podría ser,
y para que placer cuestionable
había bajado a las calles de Seleucia
desde aquellos Salones Adorados, Venerables.
Este poema se titula : Uno de sus Dioses y el autor es Constantino Cavafis.
A mi limitado parecer estas breves palabras poeticas pueden complementa rla belleza delas imágenes y la música y si no es así...al menos creo que es un bello poema de un gran escritor.
Besos fáunicos .
Hola Turco,
ResponderEliminarGracias!, yo también creo que estos versos son propicios para seguir con el clima que uno podría presentir estando entre dioses y faunos. Los faunos en sí mismos eran una divinidad menor, o sea que también eran dioses, encargados de custodiar cosechas del campo, y que vivían en el bosque... por eso, cuidado cuando vayas por algún bosquecito oscuro y solitario, porque tal vez te encuentres con alguno y ahí... bueno... lo mejor sería que te relajes y disfrutes. Je.
Gracias por tus palabras y tu comentario tan poético.
Este video fue un deleite de principio a fin, mi querido Gaucho de Oro... mezclaste música e imágenes en dosis precisas para hacer un coctel letalmente seductor; igual o mejor que esas bebidas que uno sabe perfectamente que al probarse y disfrutarse lo peor será la resaca del día siguiente; mas sin embargo son irresistible al paladar porque néctares de esta perfección no se ven muy seguido; es más, casi nunca. Así son estos varones; de los que uno sabe que no verá en un largo tiempo... y sin embargo, ¿cómo no caer rendidos a sus pies (o a sus cascos)?
ResponderEliminarTurco, el poema que citas encaja muy bien con esta secuencia; no creas que no... estos varones que hoy se lucieron aquí bien podrían ser divinidades que de tanto estar en contacto con una etérea perfección, de repente deciden bajar a la Tierra y estar en contacto con esos placeres que quizás les sean vedados, pero que, lo saben muy bien, son la mejor forma que tenemos los mortales de acercarnos al éxtasis que nos lleva allá a donde ellos moran; más allá del infinito. Por cierto, macho... ¿qué te pareció el mensaje que te mandé el domingo? Por favor coméntame...
Mi apreciable Deep: ¡no me tomes a mal el omentario, mi buen amigo! Hasta eso, sirvió para que volvieras... jeje.
Sobre el post de ayer que me fue imposible comentar... ¡OH, DIOS! La paja, chaqueta, jalada o como gusten llamarle es algo que, cuando es bien hecho es tan sublime como el placer compartido... ya lo dice un ducho muy aplicable al tema: "Una mano amiga... tradición que obliga!". Sobre las fotos, me gustaron más aquellas donde el captado no está viendo a la cámara... dan la impresión de que fueron tomadas a escondidas; y ni se diga la de aquellos que, con todo y que están entregados a tocar una y otra vez su hombría, no resisten las ganas de llevar sus dedos a sus delirantes recovecos, sabedores de que todas esas maniobras elevarán sus trances personales a la billonésima potencia... y esto lo ha dicho un defensor mundial de la paja! Ya a estas alturas es mejor jalársela que levantar a vayan ustedes a saber quién...
¡Mil abrazos a todos y que el resto de su jornada sea excelente!
Manu,
ResponderEliminardespués de tanta paja, había que tomarse un día de relax, de bucólico y calmo erotísmo, al lado del arroyo, recostados en la hierba del bosque, en ese clima fresco, aromático y oxigenado al reparo de los árboles... sí... y mañana...
bueno... seguimos con las pajas... jajajjaja
Y como me gusta el verde, decidí plantar dos arbolitos en la acera del café.
Saludos, querido.
Mozo: alcánceme la manguera...!
Brilliant! Bravo!
ResponderEliminarrufbeefdadsd:
ResponderEliminarMerci beaucoup!!!!!