Desde la primera vez que, siendo niño, me fascinó el torso desnudo de un hombre, sigo asombrándome ante la maravilla de sus formas. Que un hombre se quite la camisa es algo que, al estar aceptado socialmente en ciertos ámbitos, suele pasar desapercibido. Para mí -y sé que para ustedes también- es como si me montaran el mejor espectáculo erótico del mundo.
Hola, Franco!!!
ResponderEliminarque buen material!!! y nueva muestra que a veces, mostrando poco se sugiere tanto!!! incomparable el rubio de la 12!!!...los ojos del 20, y el boscoso trasero que asoma entre el camouflage de la 19!!!!!!una vez mas, aprobas con Sobresaliente!!!!!
Aprobé???? Uich... qué bien.
ResponderEliminarFranco cada uno de estos soldados es como decimos in italiano Ben incazzato e coglionato. Osea con grande pinga y cojones. Buenas fotos
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