Desde la primera vez que, siendo niño, me fascinó el torso desnudo de un hombre, sigo asombrándome ante la maravilla de sus formas. Que un hombre se quite la camisa es algo que, al estar aceptado socialmente en ciertos ámbitos, suele pasar desapercibido. Para mí -y sé que para ustedes también- es como si me montaran el mejor espectáculo erótico del mundo.
OMFG!!!!!!!!!
ResponderEliminarEsa barba colorina de la 5 y la 6.... y qué hablar de la barba cana de la 21.... Estoy en éxtasis.
Qué tiempo que no venía por acá Franquito. Pero como siempre y con toda humildad siento que en este post había algo para mi. Espero ir retomando la constancia de mis visitas al café. ¡¡Cómo no hacerlo con este desborde de pogonofilia!!!
Te dejo un besote barbón largo y profundo, como mi cariño.
Abrazos
Hola, bonito Deep,
ResponderEliminarTe extrañaba mucho.
Besos de barba..., y no te pierdas!
F.