Sí, siempre volverán, son ellos, los "letales". No necesariamente bellos, pero temibles. Temes enamorarte de ellos, temes que te hagan sufrir, temes no poder quitártelos de la cabeza, temes no pensar, temes que te miren, temes que no te miren, temes estar pendiente de sus llamados, de cada movimiento que hagan o no hagan, temes serles fiel, temes que te hagan feliz, temes que te hagan infeliz, y temes muchas cosas más porque son lo que son, adorables hombres letales que te harán sentir único, y temerosamente vulnerable.
Otras cuatro palabras: "el hombre que amas". Con él vas a cualquier parte, pero en la cama cuanta dicha, el antes, el durante , y el después languido, tierno y el deseo que el momento se prolongue indefinidamente, con él a tu lado.
ResponderEliminarFabrice
Fabrice,
ResponderEliminarmuy cierto.
Tal vez sea muy cursi lo que diga, pero en la cama, y con el hombre que amas, pasás por todos los momentos y matices. Y uno de mis momentos preferidos, sin duda, es el despertar. Ver a tu amante, a tu lado, que sigue ahí... con vos. Es cuando todo vuelve a comenzar.
Nada mejor de ver a dos hombres velludos con la verga cada uno erecta como una grua de la que usan los constructors de edificios. Si la verga derrama esperma, lo major. Franco tienes razon: Vamos a la cama, listos para entrar, hagamos el amor, te succiono, me succionas. No importa si 3, o 4 palabras. Son todas magicas!!!
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