Desde la primera vez que, siendo niño, me fascinó el torso desnudo de un hombre, sigo asombrándome ante la maravilla de sus formas. Que un hombre se quite la camisa es algo que, al estar aceptado socialmente en ciertos ámbitos, suele pasar desapercibido. Para mí -y sé que para ustedes también- es como si me montaran el mejor espectáculo erótico del mundo.
Caramba una verguita muy pequena pero bien viril y vellosa... Los huevos tienen el tamano y se parecen huevos de gallina. Ahhhh!
ResponderEliminarEn este caso, lo pequeño puede ocultar grandes consecuencias...!
ResponderEliminarFranco una preguntita si puedo. La foto a la derecha de tu escrito es tuya ? Si lo es, entonces tu mismo representas Vellohomo. Pecho, verga y cojones bien vellosos. Gracias si me contestas.
ResponderEliminarTony,
ResponderEliminarLa foto de mi avatar no es la mía, temo decepcionarte, sin embargo puedo decirte que soy bastante velludo, tal vez un poco más que el señor de la foto.
Saludos
Tu blog es un oasis de éxtasis y virilidad. Gracias por alegrarnos los ojos y los sentidos. Salud y suerte.
ResponderEliminarGracias por tan exquisitas palabras, visitante anónimo!
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