Así está el clima aquí, para andar en pelotas y echarte una cómoda siesta en la hamaca. Para andarte tocando sin que nada te cubra, jalarte un vello largo de la tupida mata y encaracolarlo entre tus dedos mientras sorbes el café, o rozar con suavidad un pezón mientras recitas a Mallarmé:
"Hoy no vengo a vencer tu cuerpo, oh bestia llena de todos los pecados de un pueblo que te ama, ni a alzar tormentas tristes en tu impura melena bajo el tedio incurable que mi labio derrama."
Esa desnudez que invita a jalarte con dulzura esa verga que pide tregua, como avisándole sin querer queriendo a que se prepare para otro momento de gozo majo. Esa desnudez de sentir el frío de las baldosas para refrescar los pies y dejarlo actuar como un bálsamo para conjurar este puto calor*. Quizás sea la foto sólo sugerencia, para entrar desnudo a este Café y sentir el placer de imaginar miradas y los cuerpos sin el ropaje diario de los asiduos tertulianos.
Quizás sólo permaneceré al lado de este delicioso maduro, y con mi mano libre tocar suavemente su espalda... y entre sorbo y sorbo de la embriagante bebida, contemplar con arrobamiento su mirada ida, mientras que en un pestañeo, veo otra mirada pícara, la del cíclope ojo, que enfundado en gordo capullo veo crecer con gusto sin despertar aún ningún susto, y sin timidez alguna, dejar que el pájaro llegue manso a mi mano, para pedir más caricias mientras nuestras miradas siguen dizque perdidas en lontananza.
Sí, que rico es tomar café desnudo mis queridos capullos.
Don Pepe
*(ya la RAE acaba de autoriza el carácter de intensidad del adjetivo)
Querido Don Pepe, Estamos pues en ese momento del año donde los climas parecen tocarse y las temperaturas igualarse entre los dos hemisferios. Hasta hace unas 40 horas, Buenos Aires colapsaba envuelto de un abrasador calor que todo lo hacía lánguido y lento. Las ropas hacían daño, y sólo se pensaba en quitar ese estorbo, reencontrando la propia desnudez y la del otro, en medio del sudor y la búsqueda de alivio, sea cual fuere. (aunque ya sabemos cuál es nuestro alivio preferido) Cosa mágica la de las imágenes compartidas, que sugieren cosas, momentos, deseos, que provocan estados de ánimo y nos hacen soñar con paraísos ideales donde seremos dichosos y haremos dichoso al ser querido. No es la primera vez, ni será la última, que cuando aquí nos encontramos, nos imaginamos en una reunión ideal todos nosotros, sin los inconvenientes de la distancia y, sobre todo, de la ropa, deseando primeramente estar desnudos de cuerpo para después conocer la desnudez del alma. Gracias por tu hermoso modo de mirar el mundo.
En un estudio publicado en "The journal of social Psychology" se ha afirmado que los hombres heterosexuales se sienten atraídos por otros hombres cuando beben alcohol. Y es notable que la ingesta de alcohol está relacionada con el aumento de la voluntad sexual de los hombres hacia una pareja del mismo sexo, lo que sugiere un cambio potencial en el comportamiento sexual normativo ocasional entre hombres heterosexuales, aseguran los autores del estudio de las universidades del estado de Wayne e Illinois. Así que: en esas tardes después del trabajo, cuando nada te apetece más que reunirte con tus amigos para irte de pintas al bar del barrio o mismo reunirse en la casa de alguno de ellos, si a medida que van pasando las cervezas una tras otra todo se desmadra y empiezan a suceder cosas como ponerse en pelotas y de pronto te das cuenta de que alguien te está apoyando la verga en el culo mientras tienes otra taldrándote la garganta, no te preocupes, no es que seas gay, es el efecto...
¡Bienvenidos a este nuevo megapost especial de Navidad y Año Nuevo! Salud! Chin-Chin! Santé! Cheers! Salute! Prost! Saúde! Salut y força al canut! Skool! Le-jaim! En 2009 Spencer Tunick reunió a 700 voluntarios del sur de Borgoña, Francia, para protestar contra el calentamiento global. En este caso, que el peligro del impacto del cambio climático afecte la producción de los viñedos. Un velludo reportero, también desnudo, cubrió el evento en una nota. UFFF! Adrian Paul Alonzo Hanagan (Lon of New York): Untitled, 1940s Anna Magnani con Bette Davis, cuando la conociera en Nueva York en 1953, por la premiere americana de 'Bellissima' de Luchino Visconti. El magnífico Anthony Varrecchia. Antoine Bourdelle (1861-1929) Camioneta del Correo, 1910. Ciudad de Buenos Aires. Año 1930. Isla Martín García, Provincia de Buenos. Escena de presos bañándose en el Río de la Plata Ph. Esa Kapila Cúpulas de Buenos Aires, c.1934: Las nuevas edificaciones hacia el sur en la intersección de la avenid...
Hola Franco
ResponderEliminarAsí está el clima aquí, para andar en pelotas y echarte una cómoda siesta en la hamaca. Para andarte tocando sin que nada te cubra, jalarte un vello largo de la tupida mata y encaracolarlo entre tus dedos mientras sorbes el café, o rozar con suavidad un pezón mientras recitas a Mallarmé:
"Hoy no vengo a vencer tu cuerpo, oh bestia llena
de todos los pecados de un pueblo que te ama,
ni a alzar tormentas tristes en tu impura melena
bajo el tedio incurable que mi labio derrama."
Esa desnudez que invita a jalarte con dulzura esa verga que pide tregua, como avisándole sin querer queriendo a que se prepare para otro momento de gozo majo. Esa desnudez de sentir el frío de las baldosas para refrescar los pies y dejarlo actuar como un bálsamo para conjurar este puto calor*. Quizás sea la foto sólo sugerencia, para entrar desnudo a este Café y sentir el placer de imaginar miradas y los cuerpos sin el ropaje diario de los asiduos tertulianos.
Quizás sólo permaneceré al lado de este delicioso maduro, y con mi mano libre tocar suavemente su espalda... y entre sorbo y sorbo de la embriagante bebida, contemplar con arrobamiento su mirada ida, mientras que en un pestañeo, veo otra mirada pícara, la del cíclope ojo, que enfundado en gordo capullo veo crecer con gusto sin despertar aún ningún susto, y sin timidez alguna, dejar que el pájaro llegue manso a mi mano, para pedir más caricias mientras nuestras miradas siguen dizque perdidas en lontananza.
Sí, que rico es tomar café desnudo mis queridos capullos.
Don Pepe
*(ya la RAE acaba de autoriza el carácter de intensidad del adjetivo)
Querido Don Pepe,
ResponderEliminarEstamos pues en ese momento del año donde los climas parecen tocarse y las temperaturas igualarse entre los dos hemisferios. Hasta hace unas 40 horas, Buenos Aires colapsaba envuelto de un abrasador calor que todo lo hacía lánguido y lento. Las ropas hacían daño, y sólo se pensaba en quitar ese estorbo, reencontrando la propia desnudez y la del otro, en medio del sudor y la búsqueda de alivio, sea cual fuere. (aunque ya sabemos cuál es nuestro alivio preferido)
Cosa mágica la de las imágenes compartidas, que sugieren cosas, momentos, deseos, que provocan estados de ánimo y nos hacen soñar con paraísos ideales donde seremos dichosos y haremos dichoso al ser querido.
No es la primera vez, ni será la última, que cuando aquí nos encontramos, nos imaginamos en una reunión ideal todos nosotros, sin los inconvenientes de la distancia y, sobre todo, de la ropa, deseando primeramente estar desnudos de cuerpo para después conocer la desnudez del alma.
Gracias por tu hermoso modo de mirar el mundo.