Contrariamente a los gustos actuales en donde el tamaño sí importa, en la antigüedad, Grecia lideró la tendencia a valorar y admirar a los penes pequeños, que ensalzaban las virtudes esenciales de la masculinidad. Por tanto el miembro pequeño era un aspecto codiciado en el macho alfa. Pues los hombres ideales eran dioses, héroes, atletas, etc., y todos ellos eran representados con genitales minúsculos y nunca erectos, mientras que las vergas gruesas, a menudo excitadas, peludas y descomunales correspondían a los sátiros o a todo tipo de hombres que de las más altas virtudes descendían a los más oscuros vicios, a la decadencia y al caos. En definitiva, el pene grande, para los antiguos griegos, describía al hombre vulgar, salvaje y bárbaro. Tantas veces nos hemos intrigado por lo excesivamente pequeños que a veces aparecen los penes de las estatuas clásicas, pero claro, lo bello, era otra cosa. La galería de hoy no olvida aquellos principios apolíneos. Veamos:
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ResponderEliminar¡Amigos míos! Les agradezco a todos el consuelo que nos ofrecieron tan cariñosamente por la muy injusta salida del Tri de Brasil 2014... ¿Qué les puedo decir? En lo personal debo aceptar que yo era uno de los que no estaba muy convencido (mejor dicho, nada convencido) del desempeño de nuestra selección en la fase de clasificación el año pasado y tenía la firme convicción de que iban a ir a la tierra de la samba a hacer el ridículo; pero me da mucho gusto decir que ME CALLARON LA BOCA con algo que en lo personal nunca había visto en una Selección Nacional de Futbol: VERDADERO TRABAJO EN EQUIPO. ¡La labor en conjunto nos lleva A CUALQUIER PARTE! Las circunstancias (y las movidas chuecas, por supuesto) nos frenaron el camino, pero es un hecho que alguien movió fibras muy internas para lograr lo nunca antes visto; y eso como mexicano me hace sentir MUY ORGULLOSO DE NUESTRO TRI. ¡¡¡Vamos muchacheeeeessssssss...!!!
ResponderEliminarSobre la galería de hoy... UUUUUUUUFFFFFFFFFF!!! ¡Qué deleite nos regalan siempre unas piernas peludas, por Dios! Uno de los más supremos es el paisaje que nos regalan, que muchas veces viene coronado con un DELICIOSO par de varoniles pies (lo que ahora en pleno verano acá por nuestros rumbos me tiene a mí torciendo el cuello en la calle... igual que la niña de El exorcista!!! jejeje). Ahora bien, como dicen las líneas previas que nuestro querido Franco nos obsequia, son un camino que nos conuce o nos hace imaginar cómo serán los picos y las colinas que coronan esos frondosos caminos... ¡Bellezas propias de nuestro género! Las fotos me hicieron recordad tantas y tantas veces que he acariciado furtivamente una rodilla, un muslo, una pantorrilla... esa ligereza de prendas que regalan ciertos climas y ciertos lugares (ustedes ya se podrán imaginar cuáles) nos permiten una libertad de movimientos que pueden ser carta de preesentación para después pasar a algo más... ¡Mi entrepierna se está emocionando de tan solo recorder aqellas veces que he logrado engancharme en el sauna con un ligero roce de pierna! Primero un dedo despistado al muslo que está al lado... luego dos al ver que no hay rechazo... después la palma al sentir que la victim se relaja... ¡es un masaje a la lujuria deslizar tu mano por una pierna peluda! No cabe duda...
¿Y qué comentarios me merece el Cuentito de Fin de Mes? Ya lo saben... no digo más, sólo que le hace tremendo honor a la fama de su autor al respetar tan puntualmente su característico estilo. ¡Bravísimo, GENIO! Sí, GENIO en mayúsculas y negritas. ¡No te nereces menos, Gaucho de Oro!
¡Abrazos para todos, hermanos!