Desde la primera vez que, siendo niño, me fascinó el torso desnudo de un hombre, sigo asombrándome ante la maravilla de sus formas. Que un hombre se quite la camisa es algo que, al estar aceptado socialmente en ciertos ámbitos, suele pasar desapercibido. Para mí -y sé que para ustedes también- es como si me montaran el mejor espectáculo erótico del mundo.
Genial....ya he contado aquí mi caso personal.
ResponderEliminar"Osculos para todos" en vez del convencional "besos para todos" suena más erudito, como esas palabras que aprendemos haciendo crucigramas : óbito, asir, adir una herencia,etc.....
ResponderEliminarPero "no contamos con la astucia" de nuestro Franco. De culos, culos y nada más que culos se trata.
Bienvenidos los culos y los osculos.
Fabrice
Bue... buen plato a degustar este Findesemana,... recuerdo las ostras que se comen en las calles de Paris o marsella..
ResponderEliminarPara quien quiera pasar un rato divertido recomiendo esta historieta alusiva de un tucumano: http://elosculohirsuto.blogspot.com/
especial para la GCU (gente como uno)
Cisplatino: podrías repetir ese "caso personal" para la gente que no te ha leído? imagino una historia "sabrosa"!!!
Este extasiástico post me recuerda el título de una película francesa, "Le ciel sur la tete", pues este es un placer que te deja en el abismo del placer, literalmente todo el placer dem cielo sobre nuestra pequeña estrella.
ResponderEliminarSin duda es un arte hacerla brillar para...y gemir.
Don Pepe