Peludos famosos
El más apuesto de los tres hermanitos Cartwright, sin lugar a dudas. No sé si el más peludo, porque el personaje encarnado por Dan Blocker (Hoss) también tenía sus pelos. Bonanza, la serie célebre que fuera emitida por la NBC entre 1959 y 1973 contaba las aventuras de una familia de hombres constituída por papá Ben y sus tres vástagos, que curiosamente provenían de madres distintas. A no ser por esta explicación genética, no podríamos concebir, ciertamente, que estos hermanitos fuesen tan distintos entre sí. Pernell, que cada vez que podía , salía a escena con los primeros botones de su camisa (eternamente negra) desabrochados, nos dejaba ver en claro que era hombre de pelo en pecho. Encarnaba a Adam, y como hermanito mayor, era el más seriecito de todos, en oposición al inocentón Hoss y al atolondrado y casi adolescente Little Joe (Michael Landon), del cual recuerdo uno de los bultos mejor perfilados de la tv sesentesca.
Papá Cartwright (Lorne Greene), codiciado viudito y propietario de la extensa "Ponderosa" los había educado valientes y nobles, pero hasta ahí llegaba la cosa porque era evidente que en cuestiones sentimentales, algo de su propia desventura en el arte del amor siguió trabajando en sus hijitos, ya que a éstos jamás se les conoció novia o esposa estable. Claro, una triple viudez hacen mella en la educación de cualquiera. Era ya una fija que cada vez que aparecía alguna beldad en la vida afectiva de Adam, Hoss y Joe, con el papi incluído, cada fémina a su turno terminaba dejándolos por otro, o siendo desenmascarada por su terrible y vergonzante pasado, o, en el peor de los casos, eliminada por alguna enfermedad inexorable o por un crimen terrible, que, por cierto, ellos vengarían heroicamente. Pero no, sin dudas, ninguno tenía suerte en el amor, y nuestro Pernell tampoco, quien a medida que avanzaba la serie se perfilaba como un perfecto candidato al solteronazgo.
Pero volviendo a nuestro Peludo Famoso de hoy, este Pernell tan varonil, siempre engalanó con su calma belleza las escenas de la serie , que fuera la primera en filmarse en color y con una hora de duración por capítulo. Pernell Roberts abandonó su participación en la misma por incompatibilidades ideológicas. Su adhesión a distintas corrientes pacifistas y antidiscriminatorias que por aquellas épocas marcaron un antes y un después en la historia social norteamericana, no condecía demasiado con los guiones de la serie, indiscutiblemente sexista y de una violencia frecuentemente cuestionada. No terminó de cumplir su contrato y el personaje desapareció, así fue que los guionistas para justificar su ausencia lo "mudaron" de ciudad. La idea primaria había sido casarlo con una chica que apareció en el programa con ese fin. Pero ¡pucha!, tampoco ahí tuvo suerte nuestro Adam, porque toda la audiencia le rechazó la novia, con la cual nunca habían simpatizado. Y allá se fue solito el primogénito de los Cartwright, solito y solterón, finalmente.
Pernell Roberts nació en 1928 y fue el último de los actores de Bonanza en fallecer, en enero del año pasado. Salvando las distancias, lógicamente, la madurez de Pernell fue la de un virilazo de vellos plateados, barba y siempre cuidado físico, madurez que en cierta medida puede compararse a la de nuestro padrino Sean Connery. Tal como se puede apreciar en este videoclip que bien puede tomarse como un merecido tributo.
Pernell Roberts, bueno, desconocía el nombre. Para mi fué siempre Adam. Desconocía también sus trabajos posteriores. Que guapo con barba!!! Muy atractivo.
ResponderEliminarRecuerdo que mi abuelo era fanático de Bonanza. Yo me preguntaba si no se aburría de mirar la serie.
Pobres tipos, condenados a la soledad en La Ponderosa, tan solo acompañados por el cocinero Hop Sing. Te acordás del chino de la colita, Franco? Jeje....
Besos.
La verdad.. es que nunca me gustó mucho esa serie.
ResponderEliminarLo mejor, era Pernell, sin dudas, a quien aprendí a admirar ya más adulto... pero la serie me era particularmente molesta por lo fastidioso de su doblaje (aún hoy en vigencia!) de un indescriptible origen latino-neutro... con voces feas y H aspiradas.
Claro, claro... Hop Sing... para mí que el chino la pasaba bárbaro...!