Las (otras) aventuras de Tintin

¿Se acuerdan de Tintin?

Si bien nunca fui un seguidor de sus incomparables historietas, alguna vez llegaban a mis manos de jovencito lector de cómics una de sus aventuras. Tintín es un joven reportero belga que se mete a menudo en problemas por defender causas justas. Protagonizó, entre 1930 y 1976 una de las más influyentes y exitosas series de historietas del siglo pasado a través de un total de 24 álbumes. Su autor, el belga Georges Remi, conocido como Hergé, llevó a este muchachito a ser uno de los más representativos íconos populares de Bélgica.

Tintin es bajito, rubio, y con un rulito en la cabeza que caracterizó su identidad desde los primeros capítulos. Su apariencia física y su vestuario, unos pantalones abullonados que llevará en todos los álbumes, se mantuvieron sin cambios a través de tantos años. Nunca se dieron rastros sobre su edad, circunstancias familiares, afectos ni preferencias sexuales. Sólo sabemos de su inquebrantable honradez y sus altos valores morales.

En la serie, junto a Tintín, que viaja por todo el mundo junto con su perro Milú, hay una serie de personajes secundarios que han alcanzado tanta o más celebridad que el protagonista: entre ellos, el capitán Haddock, el profesor Tornasol, los detectives Hernández y Fernández y la cantante Bianca Castafiore. Las aventuras de estos personajes están cuidadosamente ambientadas en escenarios reales de los cinco continentes, y en lugares imaginarios creados por Hergé, tales como Syldavia o San Theodoros (nombres ficticios para Bolivia y Paraguay en el conflicto de la Guerra del Chaco entre 1932 y 1935, por aquel entonces un tema de actualidad).

Y sí, es lógico que en una mirada acorde a los tiempos actuales sobre estas aventuras en la que nunca aparecían personajes femeninos de importancia, el imaginario popular (y no tan popular) detecte un guiño perspicaz en la relación del asexuado Tintin y el viril capitan Haddock, que, en definitiva, será su compañero inseparable en todas las sagas.
Fuera de los trazos de Hergé, vueltos a cariturizar, o agiornados en una nueva y sensual apariencia, he aquí las nuevas aventuras de Tintin: