Desde la primera vez que, siendo niño, me fascinó el torso desnudo de un hombre, sigo asombrándome ante la maravilla de sus formas. Que un hombre se quite la camisa es algo que, al estar aceptado socialmente en ciertos ámbitos, suele pasar desapercibido. Para mí -y sé que para ustedes también- es como si me montaran el mejor espectáculo erótico del mundo.
Fotos hermosas come todas las fotos de anteayer.
ResponderEliminarTonyitalian
Raro, en esta época de manía de tatuajes encontrar tantos marineros sin ellos. Justamente ellos, que eran con los presidiarios los que más se tatuaban. Para tener en su piel un recuerdo durante sus largas ausencias. Se agradece no ver esa manía invasiva que a mi gusto desfigura la belleza del cuerpo.
ResponderEliminarLas fotos vintage son como un remanso, con un aire de inocencia, en estos tiempos en que gusta o se impone lo "kinky".
A levar anclas pues y a navigar con estos marineritos.
Fabrice
Tony,
ResponderEliminarGracias!, que tengas un feliz domingo.
Fabrice,
Bueno, hay que tener en cuenta que muchos acá no son marineritos reales, claro.
Y sí, en cuanto a los tatuajes, no sé que vamos a hacer..., dentro de poco ya no existirán hombres naturales, al menos los que toman por profesión exhibirse desnudos.
Fabrice tiene razon. Un tatuaje pequeno aunque bien colorado esta bien. Pero tener como una sabana que cubre todo el cuerpo es una pena. Todo el cuerpo sufre.
ResponderEliminarTonyitalian