Un post de verano

No es que odie el verano, pero, personalmente prefiero los climas más fríos, sobre todo viviendo en esta ciudad, donde las temperaturas sobre el cemento suelen ser insoportables. Por eso soy de disfrutar más bien los hogares encendidos, las lluvias o días grises, y me gusta sentir el viento helado en la cara. Igualmente, hace falta siempre la compensación del sol y su calor aunque sea agobiante. La solución habitual siempre fue huir de casa y refugiarse en el mar. Este año, lamentablemente, esa situación tendrá que esperar. Sin embargo sé cómo es pasar los más calurosos días del verano en Buenos Aires, y sólo espero que los meses por venir sean benignos. Mientras tanto, no hay nada de malo en pasear por estas fotos, todas imágenes de momentos felices del verano. Ojalá así sea, feliz para todos nosotros.