Atracción intensa
En materia de vello púbico podríamos hablar por horas. Hoy armé una galería especial en ese sentido. Cuando yo era adolescente y uno de mis lugares sagrados era el vestuario de hombres del club donde iba a hacer natación, un día, sentado en mi banca e intentando vestirme torpemente mientras mis ojos iban y venían sobre el paisaje irresistible de decenas de machos en pelotas, quedé boquiabierto cuando, saliendo de las duchas, ví a uno de los instructores completamente desnudo. Y lo que ví me brindó uno de los materiales de pajas más entrañables que hoy recuerde. El tipo era prácticamente lampiño. No tenía atisbos de vello en sus pienas, brazos, pecho ni abdomen. Desde temprana edad los hombres velludos venían pareciéndome los más hermosos, y tal vez por esa razón nunca me había fijado en ese instructor paseándose en speedo por el borde de la piscina. ¿Qué fue lo que me dejó sin aliento?, pues alrededor de una verga pendulante y bastante gorda, el pubis lucía una cantidad inusual de vell...

Bueno, peor es nada. El cuerpecito lo conserva muy bien. Pero aún seguimos sin saber si Bruno tiene dientes. Nunca los mostró.
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarAyer no pude pasar por el café. Muy Lunes jejeje.
ResponderEliminarGracias Franquito, algo es algo. Visto así, mas viejito y con esa sonrisa de boca cerrada, hasta ternura me dió. Para mi sigue en carrera, sigue bueno el madurito; coincido con Emeka, es increíble lo bien que se conserva ese cuerpo. Yo a esa edad ya voy a estar hecho mierda jejeje.
Gracias de nuevo, guardo la imagen por supuesto.
Un abrazo
PD: todavía no leí los comentarios de ayer, después que los lea escribo de nuevo.