Acerca del amor
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De la belleza clásica
Contrariamente a los gustos actuales en donde el tamaño sí importa, en la antigüedad, Grecia lideró la tendencia a valorar y admirar a los penes pequeños, que ensalzaban las virtudes esenciales de la masculinidad. Por tanto el miembro pequeño era un aspecto codiciado en el macho alfa. Pues los hombres ideales eran dioses, héroes, atletas, etc., y todos ellos eran representados con genitales minúsculos y nunca erectos, mientras que las vergas gruesas, a menudo excitadas, peludas y descomunales correspondían a los sátiros o a todo tipo de hombres que de las más altas virtudes descendían a los más oscuros vicios, a la decadencia y al caos. En definitiva, el pene grande, para los antiguos griegos, describía al hombre vulgar, salvaje y bárbaro. Tantas veces nos hemos intrigado por lo excesivamente pequeños que a veces aparecen los penes de las estatuas clásicas, pero claro, lo bello, era otra cosa. La galería de hoy no olvida aquellos principios apolíneos. Veamos:
Love is all we need!
ResponderEliminarHello Franco merci pour tant de belles et tendres photos j'ai un coup de cœur mais vraiment gros coup de cœur pour le couple l'un debout l'autre en chaise roulante, bisous tendres et coquins de Suisse, Philippe
ResponderEliminar"El que tenga un amor que lo cuide, que lo cuide......" dice la canción. Mejor consejo imposible
ResponderEliminarFabrice
El amor es el sentimiento mejor. Cuando el amor se muere, no hay remedio!!!
ResponderEliminarTonyitalian
El sexo con amor es una melodia diferente: al conocer más detalles del otro, empleas más pausas y en cada acometida te dedicas más intensamente a úna sola variante, procurando sorprender con algún detalle. Con la pareja no se deben emplear todas las variantes en un mismo lance. Con ello descubres las muchas posibilidades de proporcionar placer, pareciendo una novedad en cada ocasión...
ResponderEliminar¡Aaaah! Querido Franco, ésa es una galería que está hecha para tirar sus amorosas flechas al corazón de tus lectores. Que lindas imágenes. Ya te imagino coleccionándolas mientras miras a tu jardín y recuerdas tantas otras que te llenan el corazón. Porque como cada galería de este Café, ésta es algo muy tuyo que toca algo muy nuestro: la ternura entre dos personas que se aman o son amigos.
ResponderEliminarEsa miradas abiertas o furtivas, esas caricias imprevistas o como parte del momento íntimo, una sonrisa por allí, otro abrazo por allá en momentos de tristeza o de alegría, un cálido beso, ligero como mariposa, fugaz como colibrí, ardiente como una chimenea en invierno. Eso y más hace latir de manera acompasada nuestro enamorado corazón al ver las imágenes de Acerca del amor, que sí lo que hace es acercarnos al amor. Que bonito se siente que nos amen, que nos cuiden, que compartan un tiempo y un espacio, pero más bonito es amar sin condición, entregarlo todo.
Veo, miro y siento cada imagen y me hace recordar nuestro encuentro. Dos amigos, enamorados de sus parejas, y que comparten tantos secretos que se han dado en años de encuentros virtuales. Sí, me hacen recordar esa llegada tuya al hotel, la cerveza en el barcito, la cena, el recorrido nocturno por las calle de la antigua Buenos Aires, el café de la mañana.
Te agradezco en nombre de la vieja barra, aquella de sabrosas y encendidas charlas, porque a través del rostro de desconocidos veo el de aquellos otros que estuvieron en tu maravilloso Café Vellohomo.
Que tierno, de verdad. Mirada, abrazo y beso para ti querido.
Don Pepe.
Queridos míos (perdón por si suena un poco posesivo)
ResponderEliminarLes estoy muy agradecido por los cálidos comentarios de hoy.
Creo que si no se sabe amar, si no se es amado, un post como el de hoy podría pasar desapercibido, o peor aún, otros muchos podrían decir "cómo?, no hay desnudos, qué pasa?"
Pero sé, como dice el dicho popular: "con qué bueyes estoy arando", y la receptividad de cada uno de ustedes merece una galería preparada y, sobre todo, elegida con esmero para que cuando salga a la luz cumpla su cometido.
Como siempre digo, hacer un blog tiene mucho de tirar un mensaje en una botella al mar, pero también, cuando sabés que dentro de ese mar conocés a aquellos que podrían recibir ese mensaje, todo es menos casual y más fácil de comunicar.
Por tanto, gracias Anónimo, Philippe, Fabrice, Tony, Waufrid y especialmente a Don Pepe por dejar su recuerdo de la antigua barra de VH y de cuando nos conocimos personalmente en Buenos Aires (más de uno pensará que pasamos una noche de lujuria en su hotel y desayunamos en la cama al despertar...��)
El amor une almas, tanto de parejas como de amigos. Las formas pueden diferir en una variante de la pasión, pero estoy seguro de que el amor no se termina. Si el amor terminara, no habría razón para vivir. Disculpen si suena kitsch, pero no hay otra manera de definir a ese motor vital.